viernes, 22 de mayo de 2020

Capítulo 6






Ya que Félix no parece tener intención de moverse de su lado y al viudo le excita demasiado tenerlo casi desnudo a su lado, Robert se levanta. Felix lo mira triste, Robert se mete en el agua con sus hijos. Félix se levanta, agarra su celular y camina por la piscina luciendo cuerpazo provocando suspiros en más de uno, pero él solo tiene pensamiento para un hombre  al que desea inmortalizar. Se acerca al agua, Robert está jugando con sus hijos. Hace fotos al viudo, lo mira como si fuera la mejor obra de arte. También hace alguna fotos a los 3 para disimular. Robert ve a Félix, de pie cerca del agua, casi desnudito, muy seductor, provocador y haciéndole fotos... sonríe coqueta. Bart ve a Félix y sale del agua:
--¡¡yo quiero... yo quiero hacer fotos... vete al agua que yo os hago unas fotos¡¡
Félix le explica al niño como funciona y él se va al agua.
--¡¡los 3 juntos... abrazad a papá¡
Segundo abraza a su padre por los hombros en seguida. Félix y Robert se miran nerviosos. Feliz lo abraza, Robert está muy tenso.
--sonríe --le susurra Félix al oído.
Aunque le pone nervioso, a Robert le gusta sentir que Félix lo está tocando, pero le asusta porque su hijo, de casi la misma edad que el chico que le gusta, está a su lado.
--¡¡y ahora los dos dando un beso a papá¡ --ordena el fotógrafo.
Robert está apunto de decir a Félix que ni se le ocurra pero Félix es más rápido . Félix besa al viudo de su padre muy cerca del labio. Es un beso que llena de placer a los dos. Un beso que llena también de remordimientos al hombre y dispuesto a comportarse con ese chico que tanto le gusta como lo que es, el viudo de su padre, Robert sale del agua. Félix lo mira enamorado y al viudo le gusta mucho verlo a Felix  en remojo y casi desnudo pero controla sus hormonas. Agarra el celular que lleva su hijo al que dice:
--vuelve al agua... ahora yo quiero una de mis 3 hijos...
A Félix le duele lo de hijo tanto como al viudo... La tristeza de Félix conmueve a  Segundo que piensa que tal vez sí ese chico se esté enamorando de su padre y le sabe mal que los dos vayan a sufrir ya que aunque nota que a su padre le gusta mucho ese chico no parece estar dispuesto. Cuando salen del agua Félix pasa por el lado de Roberta le susurra al oído:
--yo sé que no soy un hijo para ti, soy un hombre que te gusta... lo noto en tu forma de mirar...
Las palabras de él estremecen al viudo, le hacen sentir joven. Hace mucho que no veía a nadie herido de amor por él. Félix ya le ha dicho lo que le tenía que decir, ya casi ni lo mira en el resto del día. Se separa del grupo y les dice:
--me regreso a la casa solo... quiero hacer algo.
Felix y Roberta se miran con mucha tristeza. A la vez es un alivio. Esas duchas es una prueba de fuego para ambos. Félix va a buscar una tienda  que revelen rápido. Así que en unos minutos ya tiene las fotos. Una a una mira todas las fotos que tiene de Robert.
--será un recuerdo muy bonito --dice mirando con lágrimas en las ojos las fotos que se hizo en las que están el viudo y sus hijo
Félix se seca las lágrimas:
--¡¡no de recuerdo no...¡¡Robert siente algo por mi y yo no me conformo sólo con esto¡¡¡no me voy a retirar sin luchar y va a ser una lucha sin tregua, una lucha hasta que Robert reconozca que me ama aunque su esposo, mi padre, se retuerza en su tumba...¡¡él muy desgraciado es lo que merece, que su viudo lo olvide...¡¡¡yo no voy a permitir que le guarde luto¡¡
Mira de nuevo esas fotos y su rostro se llena de ternura:
--No me importa tu pasado... yo me estoy enamorando de ti por lo que eres, no por lo que fuiste... Ese hombre ya no importa... ojalá pronto nadie se acuerde de él... ojalá lo único que te impida amarme es que soy más joven que tú y eso es una tontería que espero poder borrar...

Félix llega a la casa. Ya tiene llaves. Abre. Robert está en el comedor.
--hola.
--hola --dice Felix.
Los dos se miran con mucho amor pero guardando las distancias.
--¿estás solo?
--No, mis hijos están jugando en el cuarto de Bart.
El corazón tanto de Félix como de Robert late con más fuerza que nunca al estar el uno cerca del otro. Va a mil por hora.
--¿estás enojado conmigo? --Robert.
Felix sonrie y Robert suspira:
--creía que el que estaba enfadado eras tú...
Robert desea acariciarlo pero no lo hace:
--es que creo que está habiendo un malentendido, tú aquí estás como el hijo de mi marido y te estás tomando libertades que no te corresponde...
Félix acerca a milímetros su cuerpo al del hombre. Casi se rozan. Le hace sentir su aroma, su olor, su aliento:
--¿y a poco no te gusta?
Robert tiembla de deseo y suplica:
--no me hagas sentir que soy un mal hombre, apenas se cumple una semana de la muerte de mi esposo... ¡¡por favor... no me hagas sentir cosas que no debo¡¡
Félix sonríe:
--¡¡entonces te pasa lo mismo que a mi¡¡
Robert y Félix se miran enamorados con ganas de decir que aunque es una locura, es una locura hermosa y quieren vivir ese tan mágico que les está pasando. Robert se aparta de él y toma un retrato de Rafael y se lo enseña a Félix:
--¡este hombre era mi marido... tu padre¡¡¡respétalo¡¡
Félix se muere de rabia, tiene ganas de decir que ese hombre era un miserable y que lo odia pero no lo hace. Robert deja esa foto ahí y deja solo a Félix muerto de la rabia. Félix mira la foto de su padre y dice para sí:
--¡¡te voy a quitar a tu hombre, maldito... Yo le haré más feliz de lo que tú lo puedas haber hecho... un hombre como tú no pueda hacer feliz a nadie...¡¡¡estoy seguro que conmigo Robert se daría cuenta que nunca fue tan amado como conmigo... Ni contigo ni con cualquier otro hombre de su pasado...¡¡¡
Félix mira a su padre con rencor y es que le duele que él haya tenido al hombre que está amando. Apaga su rabia cuando oye que entra Bart . El niño abraza al que considera su hermano. Con él está  Segundo.
--¿qué tal?
--¿como va?
--donde fuiste?¿cómo no conoces la ciudad? fuiste a ver a alguien...
--No, llevé las fotos a imprimir. Me gusta tenerlas en papel.
Félix tiene bien guardadas en el bolsillo las fotos que le hiciera a Robert. Robert sale de al cocina.
--¡¡mira papá... no tienes ninguna foto con mi hermano Félix con los otros en la estanteria ¡¡ --le dice Bart poniendo unas cuentas fotos sobre las manos de su padre.
Robert mira las fotos en las que están ellos dos , suspira enamorado. Félix sonríe con tristeza. Robert pone la de los chicos con el niño apoyada en el marco de la foto de boda de Rafael y Robert. Una foto que no hace más que atormentar a Félix y desea más de una vez romper.
--aquí, mis hijos con mi esposo... el padre de Félix... --dice con amargura.
Félix está muy triste. Robert deja las fotos en las manos de Bart :
--devuélveselas a tu hermano Félix...
El niño, inocentemente, toma una de las fotos (en la que los dos galanes besan en la mejilla a Robert) y le dice:
--quédatela tú, en tu habitación... y está también (una de las que está Bart )
Félix sonríe al notar la emoción de Robert al tener en su mano una foto de ellos dos juntos.

Luego en la noche, Félix no puede dormir:
--no me ve como un hijo... ¡lo sé¡¡lo sé¡¡tiene miedo, la situación no es fácil pero yo lucharé hasta que  acepte nuestro amor.
POr su lado, Robert mira la foto en la que está con Félix. Tiembla al recordar su desnudez, sus caricias, sus tiernos besos. Lo besa:
--¡¡te amo, te amo y aunque nunca te lo vaya a decir... cómo te amo...¡¡

Al dia siguiente, en silencio, Robert lleva a Félix hasta la tumba de su padre.
--no me gusta este lugar, para qué me trajiste aquí? --pregunta aquí.
Robert lo mira muy serio y dice:
--¡¡aquí, ante la tumba de tu padre quiero que me jures que me vas a ver casi como a tu padre, como a un hombre al que no puedes seducir¡¡
Felix lo mira seductor:
--a ti te gusta.
--eso no viene al caso... quiero que me jures que no va a pasar nada entre nosotros...
--¡¡yo no voy a jurar eso... claro que no...¡¡
--no me hagas esto... Félix... no --le suplica .
Félix le pone las manos en las mejillas. Y los dos tiemblan con ganas de besarse Félix le dice:
--entre tú y yo pasará lo que tenga que pasar, lo que nosotros queramos... y aquí ante la tumba de tu esposo te lo digo... ¡¡voy a luchar por tu amor¡¡
Felix se va y Robert se lo queda mirando. A los dos el corazón les va a mil por minuto.

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Capítulo final

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